El movimiento de Houston fue claro esta temporada. Tal vez nos encontrábamos ante el último año de vida de este modelo basado en los datos y quería construír desde el ataque y para ello no le bastaba tener al jugador que más aclarados jugaba de la liga en la temporada 2018-19, James Harden. Incorporó al número 2, Russell Westbrook señalando en cierta forma a Chris Paul. La primera duda, si Harden y Westbrook mantendrían esta eficacia jugando juntos quedó resuelta. Hoy ambos son el primero y segundo en el ránking de puntos anotados mediante aclarado de la competición. Chris Paul, que les llevaba a jugar más pick and roll se ha reconvertido a un jugador de espacios intermedios siendo el jugador con mejor porcentaje de esta temporada en tiros sobre bote a media distancia de toda la NBA (60.1%)
Para ello el GM han querido rodearles de jugadores con amenaza exterior, desde Ben Mclemore a Robert Covington sumando de esta forma hasta 8-9 jugadores con un porcentaje entre el 35%-41% en tiros de 3.
El jugador sin amenaza exterior será considerado interior, y ese no era otro que Clint Capela, que por el contrario se aprovecha de las ventajas generadas por sus compañeros para recibir en espacios cercanos a canasta, siendo el jugador que más posesiones consume por partido (4.8) en situaciones de juego sin balón (Cut).
Los Rockets nos trasladan esta temporada hacia la parte más simple y pura del juego; con la llegada de Westbrook, han incrementado la velocidad en su juego. En ese marco los compañeros también tienen más oportunidades de anotar en transición. Su filosofía basada en el 1c1, buscando al rival más débil ha propiciado que cualquier mínima intención de ayudar se convierta en un castigo constante en situaciones de spot up para lanzar de 3 puntos o atacar una recuperación defensiva. Capela se encontraba muy cómodo esperando cerca del fondo hasta que su defensor debía ayudar, finalizando con rebote o juego sin balón. En Houston el pick and roll ha pasado a ser un concepto accesorio, para evitar cambios defensivos que enturbien el plan y por supuesto la generacion desde el poste bajo, una quimera.
Todo esto ha modelado un esquema de juego muy claro, donde los Rockets usan 23 posesiones por partido en correr al contrataque (20% de sus posesiones finalizan de esta forma), tan solo por detrás de los Bucks y los Raptors (ambos con 24.2 posesiones por partido).
En las situaciones de aclarado no tienen rival posible, consumiendo 23 posesiones por partido (20% de sus posesiones) por 11.2 posesiones de su seguidor más cercano (Portland). Houston es capaz de anotar 24 puntos por partido desde este tipo de situaciones (13 puntos por partido más que Portland).
Por último, sus situaciones de spot – up, provinientes de las situaciones previamente nombradas, constituyen el 23% de sus posesiones que lo lleva a colocarse como el tercer equipo que más anota por partido por esta vía, empatado con Pelicans (27 puntos) y cerca de los líderes Dallas Mavericks con 29 puntos por partido.
Estos datos y muchos más, incluso conectados con estadísticas defensivas del rival, los Lakers, a continuación.
Y por último un debate…¿ganen o no, los Rockets llegan a conseguir que el rival deje de hacer su juego para adaptarse al suyo (quintetos, posesiones, tipo de lanzamientos)?
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